Tierra y Libertad

El día de ayer se conmemoraron 105 años de la muerte de Emiliano Zapata, también conocido como el Caudillo del Sur, abatido en Chinameca, estado de Morelos. Zapata fue un líder revolucionario que se convirtió, por su intensa lucha, en un símbolo de resistencia campesina, siempre a favor de los desposeídos. No se pueden entender las luchas sociales posteriores a la Revolución Mexicana sin la influencia de Zapata, no solo en el contexto agrario, sino  también en el ámbito de las comunidades indígenas y movimientos obreros que han resistido los embates del poder de los corruptos. En su figura muchas organizaciones sociales han visto un símbolo de justicia social, de igualdad, de libertad. 

Pienso que la lucha de Zapata aun está vigente, y aunque la sociedad ha cambiado, el arraigo a la tierra sigue teniendo una importante dimensión social, sobre todo en lo referente a los derechos. Un ejemplo es el derecho que deberíamos de tener para vivir en un medio ambiente sano, y para ello es necesario exigir a los gobiernos la creación de políticas publicas para el cuidado del entorno, pero también es necesario y urgente que, como habitantes de las ciudades, impulsemos proyectos autogestivos de producción que no devasten la naturaleza. 

En Iztapalapa, en San Miguel Teotongo, impulsamos la agricultura urbana, y es inevitable, cuando se lucha por una mejor sociedad, no recordar el famoso lema de Zapata  “Tierra y Libertad” o aquel otro de “La tierra es para quien la trabaja”.

¡Zapata Vive, la lucha sigue!

José Luis Fausto Gutiérrez Neri

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